.: Novedades :..: Películas :..: Informes :..: Entrevistas :..: Videogames :..: Festival Montevideo Fantástico :..: Twitter :..: Home :..: E-mail :..: Imprimir Documento :.




Tercera edición de "Buenos Aires Rojo Sangre"
DE LOS FESTIVALES QUE HACEN FALTA

por Alejandro Yamgotchian (diciembre, 2002)


Durante el pasado viernes 29 y sábado 30 de noviembre de 2002 en el Centro Cultural General San Martín, de la capital porteña, tuvo lugar "Buenos Aires Rojo Sangre 2002", tercer festival de cine fantástico, bizarro y terrorífico organizado por nuestros amigos argentinos de QuintaDimension.com, la revista virtual de ciencia ficción, terror y fantasía.

Arte7 estuvo presente en este evento donde participaron materiales de varios países (Argentina, Brasil, Colombia, España, Estados Unidos y Francia), entre estos Amor brujo (de la que muy en breve hablaremos y que vendrá con sorpresita), de nuestro compatriota Ricardo "Plenilunio" Islas.

El primero se había realizado, con gran éxito, en diciembre de 2000 en el Microcine de la Facultad de Ciencias Sociales de la U. B. A., mientras que el segundo en la sala A-B del Centro Cultural General San Martín, en diciembre de 2001. El fin de este festival, según los programadores Pablo Sapere y Gabriel Schipani, es "brindar un espacio a los jóvenes realizadores que incursionan en un género que generalmente es relegado en la gran mayoría de los encuentros cinematográficos. La idea es convertir a Buenos Aires Rojo Sangre en un referente para todos los aficionados al género fantástico. Otro de los objetivos - prosiguen - es lograr una continuidad en la programación cinematográfica nacional, llamando la atención sobre estos géneros a productores y distribuidores locales e internacionales."



MATERIAL AL ROJO VIVO

Para destacar hay cosas que van desde trailers y animaciones hasta cortos muy llamativos y largometrajes sumamente interesantes. La apertura del festival la hizo la lucha entre el bien y el mal (AntiCristo incluido) de Amor brujo y, cerrando el primer día, la espectacular (en todo sentido y con referencias al gore de la trilogía zómbica de George Romero y el humor negro de Sam "Evil Dead" Raimi) Plaga zombie: Zona mutante (Pablo Parés y Hernán Sáez, 2002), secuela de Plaga zombie (mismos realizadores, 1997).

El sábado 30 la programación se inició con un montonazo de cortometrajes argentinos, incluido El increíble ataque en bicicleta del Monstruo Biónico de Seis Brazos, de Mariano Cattaneo e Ygnacio Cervio, y Carne (Federico Sandoval, 2002), un impactante documental-ensayo, sin eufemismos, acerca del trabajo de funebreros, diseccionadores y demás. El cierre quedó en manos de Attack of the Killer Hog (Agustín Cavalieri y Marcos Meroni, 2002; quienes tardaron cinco años en terminarla), un largometraje con asombrosos efectos especiales y donde no faltó (aunque ustedes no lo crean) la 486 ni la Pentium I, a la hora de narrar la historia del bicho del título, sus asesinatos y una curiosa disputa entre humanos y extraterrestres. Respecto a los cortos cabe acotar dos títulos que llamaron mucho la atención: Plata segura (ejercicio animado sobre niño pobre y humilde que quiere ser estrella de fútbol) y Bar Imperial de Gabriel Grieco, sobre tanguero racista que es llevado al lugar del discriminado.



A CHARLAR UN RATO

Para saber más de algunos entretelones del evento, Arte7 realizó una entrevista a uno de los programadores del festival y alma matter de QuintaDimension.com, Pablo Sapere (28):

Plaga Zombie: Zona mutante
Amor brujo
Attack of the Killer Hog


"Buenos Aires Rojo Sangre" puede sonar como algo medio sensacionalista para la gente, digamos, normal. Sin embargo esa no es la idea del evento, ya que apunta a difundir un género que, como se sabe, es bastante subvalorado y que tiene sus cosas para decir...

Mirá, el "Buenos Aires Rojo Sangre" es una apuesta al cine fantástico, una apuesta a la imaginación. Para los que buscan sensacionalismo, el consejo es que prendan la TV y busquen un noticiero, un reality show o cualquier programa de Canal 9.


¿Cómo evaluás la respuesta del público en este evento?

En relación a la cantidad de público, la respuesta me pareció muy buena. Duplicamos la cantidad de espectadores del año pasado. Esto se notó especialmente el sábado. ¡Para el estreno de Attack of the Killer Hog habían 600 personas! Creemos que en total pasaron, a lo largo de ambas jornadas, unos 1.500 espectadores. Nada mal para un festival con recursos tan limitados. Lo que fue excepcional, también, fue la respuesta de ese público, que en algunos casos se bancó la programación completa (¡como 6 horas seguidas!), que aplaudió con fuerza lo que le gustó y que soportó con mucho respeto los problemas técnicos que tuvimos. 




¿Y la de los medios de comunicación?

La respuesta de los medios también mejoró con respecto al año pasado. Esto se hace evidente, por ejemplo, sumando la cantidad de centímetros obtenidos en la prensa escrita, que duplica la cantidad que conseguimos el año pasado. Igualmente hay medios que decididamente nos ignoran, como por ejemplo el Clarín, el diario más vendido de la Argentina. La información indudablemente la tenían, ya que fue llevada personalmente por mí a la redacción. Además el periodista que la recibió fue posteriormente contactado por teléfono y por e-mail.¿Por qué, entonces, la noticia no fue publicada? No lo sé... tal vez por que no le interesó a ese periodista, tal vez por una decisión del jefe de sección. Como sea, el hecho de no aparecer en el medio paradigma del cine mainstream, no deja de tener un valor simbólico. La noticia también salió en algunos lados que nos sorprendieron, como en el Diario Popular, que no se caracteriza por un perfil cinéfilo, y en el InfoBAE, un diario del grupo de Radio 10, Canal 9, etc.; es decir, de un perfil que va directo hacia lo conservador, con una ligera curva hacia la derecha. Son cosas raras, pero que realmente nos vienen bien. Por supuesto que el mayor apoyo llegó de los medios mas independientes, como el diario Página/12 que sacó un artículo a página completa del festival y como ya lo había hecho el año pasado. Gran parte de la movida que pudimos hacer fue gracias a Internet, a través de todas las webs especializadas que nos dieron una mano.



¿Se lograron los objetivos que más o menos querían?

Absolutamente. Nuestro principal objetivo era que el festival creciera con respecto al año anterior. Y conseguimos hacerlo, tanto en público como, fundamentalmente, en calidad de la programación.  


¿Pensás que el papel de los organismos estatales argentinos, para con las distintas ediciones de "Buenos Aires Rojo Sangre", ha colmado tus expectativas?



El apoyo que tuvimos fue mínimo, pero útil. El Centro Cultural San Martín nos dio una de sus salas gratuitamente, el Museo del Cine nos apoyó con ciertos trámites, y el Instituto de Cine nos exceptuó del pago de un impuesto. Son cosas pequeñas, pero necesarias para la realización del festival. Ciertamente no vendría mal más ayuda, sobre todo apoyo con la difusión o la cobertura de ciertos gastos mínimos, llámese pago de impuestos como el Argentores, impresión de programas, que salieron de nuestros bolsillos.  


Tengo entendido que en el Festival de Cine Independiente de Buenos Aires no han aceptado materiales de corte fantástico, como Plaga zombie: Zona mutante. ¿Qué pensás al respecto?

Tristemente, eso es cierto. Los actuales funcionarios que están a cargo del festival, principalmente el staff de la revista El Amante, liderados por Quintín, no demuestran interés por este género. Una película como Plaga zombie: Zona mutante tiene nivel como para ese festival, al menos en una de sus secciones paralelas. Lo que da bronca es que se utilicen recursos del estado para hacer un festival tan elitista, pensado sólo en satisfacer los gustos de los propios programadores, y desconociendo qué es lo que quiere ver el público. Y pensar que el Gobierno de la Ciudad otorgó medio millón de pesos para la última edición. Con las anteriores autoridades del festival hubo ciclos bizarros terriblemente exitosos, recuerdo especialmente uno sobre Ze do Caixao en la primera edición. Lo que está pasando ahora, sin embargo, es que se está ignorando olímpicamente a muchos realizadores argentinos que se están metiendo en el género.

Bar Imperial
Plaga Zombie: Zona mutante
Attack of the Killer Hog


Ya veo... Otra cosa... ¿hay pocos alumnos de escuelas de cine argentinas realizando trabajos vinculados al género fantástico, especialmente al terror? Pregunto esto porque en Uruguay prácticamente no existen.

No son pocos. Hay muchos estudiantes que se vuelcan al cine de género. Ciertamente son una minoría, frente a una gran línea de pensamiento, que va desde las escuelas de cine hasta el festival de cine (in)dependiente, que dice que lo único que merece llamarse cine es el "cine de autor" y que cine de género es algo decididamente menor. Por suerte muchos chicos zafan de eso. La mayoría de los que presentaron material en "Buenos Aires Rojo Sangre 2002" son estudiantes o graduados de las diversas escuelas de cine que hay por aquí.  


Hmmm... En fin. Dejémosla por ahí. A propósito... ¿cómo ha recibido el público argentino el primer episodio de Amor brujo, del uruguayo Ricardo Islas?

Lamentablemente el comienzo del festival, y en realidad siguió así hasta el final, fue un poco accidentado para nosotros, porque palmó el proyector minutos antes de arrancar la proyección. Finalmente arrancó un rato mas tarde y hubo que hacer cambios en la programación y resolver otros quilombos. En definitiva, no pude dedicarme realmente a recoger las impresiones del público sobre los diversos films; mi grabador durmió en el bolso durante todo el festival. Sólo hablé con aquellos que se iban acercando a la mesa de la organización y en general la respuesta fue bastante positiva. Me han consultado sobre si la serie fue dada en algún canal en Estados Unidos, me han hablado bien de los FX, especialmente de una decapitación que aparece al principio, e incluso vino uno con cara de cebado preguntado cuando dábamos el resto de Amor Brujo. En síntesis, creo que todos quedaron con ganas de verla completa. Esperemos que algún canal de cable reaccione y se decida a ponerla.


Ojalá, y que también llegue a Uruguay, por supuesto. Islas es un realizador muy respetado allá y que incluso tiene sus seguidores. Ahora... ¿qué me decís de Carne, el documental que entrevista a personas que trabajan con cadáveres?

Al contrario de lo que pensamos, no hubo fugas masivas de la sala y nadie se descompuso. Alguno se nos acercó y nos dijo "ché, que buenos efectos". Sólo empezó a empalidecer cuando le dijimos que allí no había ningún efecto especial.

Por lo que veo las ediciones han ido teniendo cada vez más éxito. ¿Piensan hacer una cuarta edición de "Buenos Aires Rojo Sangre" para el año que viene?

Por supuesto. Ya estuvimos hablando con Gabriel Schipani, el director del festival, y ciertamente el objetivo es seguir creciendo. Desde ya vamos a tratar de tener más jornadas, porque tuvimos que dejar muchísimo material afuera. También vamos a tratar de ajustar otras cosas, que en base a la experiencia vamos aprendiendo a hacer mejor. Y por supuesto tenemos pensadas algunas sorpresas, que recién podremos revelar cuando la cosa empiece a concretarse.  


¿Cómo te sentís organizando un evento cuyo único motor es tu pasión por el cine fantástico y que, lamentablemente, no te deja el dinero necesario?

No sólo no deja dinero, sino que perdemos plata. Y ciertamente dada la situación actual de este país, eso nos duele. Duele, además, que el principal gasto haya sido el pago de un impuesto a Argentores, el sindicato de guionistas. ¡Pagar impuestos en un festival con entrada gratuita! Igualmente el objetivo del festival no pasa por lo económico, aunque uno de los propósitos para el año que viene es que se autofinancie. De todas maneras, nos parece muy importante hacer esto, porque no hay nada similar en esta ciudad y porque es la única oportunidad que hay de sentarse en una sala y ver horas y horas de cine fantástico. En definitiva, lo hacemos porque esto nos apasiona. Y nos encanta poder compartir esta pasión con otros aficionados.


.: Derechos Reservados :.